Esta novela habla sobre Bianco, un mentalista italiano que se viene a instalar a la pampa, luego de sufrir una estruendosa humillación pública por parte del bando positivista de París. Estamos hablando de comienzos del siglo pasado. En estas tierras, se relaciona con un médico criollo de “buena familia” (Garay López) y se casa con una hija de inmigrantes italianos (Gina). El ambiente de la llanura es opresivo y hostil, sin embargo es lo que necesita Bianco para recargar energía y poder preparar una defensa escrita que mostrar en Europa. Bianco se ha vuelto progresivamente rico, y cuando parece que están dadas las condiciones para cumplir con sus planes, un hecho casual lo pone en alerta con respecto a la relación entre la joven Gina y el médico. En mi opinión, esta historia medular de la novela corre el riesgo de volverse poco atrapante cuando el protagonista se empieza a ahogar (¿regodear?) en los celos y presunciones con cierta redundancia. Claro que el autor no deja que esto pase. Los elementos que nos permiten hablar de un gran texto, a la altura de lo que Saer nos tiene acostumbrados, son varios. Por un lado, la historia del tape Waldo (con la que se enlaza acertadamente esta historia central) no tiene desperdicio. Lo mismo pasa con personajes secundarios de enorme riqueza (como el hermano de Garay López) o digresiones como la de Belén. Por otra parte, la manera en que las historias se incrustan en el momento histórico en que está situada la novela: toda referencia de época es de una claridad asombrosa para dar cuenta de cómo se fue desarrollando la Historia de la pampa argentina. Se trata de un texto riquísimo en imágenes autóctonas, pero no por eso empalagoso. Es que Saer tiene la notable capacidad de hacer novela histórica sin que nos demos cuenta de que lo es. Por último, y como elemento aglutinador, la envolvente y yo diría elegante prosa saeriana, que si bien en este caso no llega al límite de las posibilidades narrativas y de redacción, nos ofrece una muestra más de destreza autoral.
Personalmente, tengo que decir que no es la novela de Saer que más me gustó. Como dije anteriormente, la historia base no logró atraparme del todo, incluso la manera en que Gina se conduce con Bianco me llegó a irritar. Pero éstas son apreciaciones demasiado personales. Creo que se trata de un texto histórico excelente, una muestra de esa buena literatura que no es tan fácil de encontrar.
ADVERTENCIA: No tome al pie de la letra a la contratapa de Seix Barral cuando dice: “Bianco, cada vez más obsesionado por la fidelidad de su esposa, constata cómo a medida que acumula riqueza material va perdiendo sus poderes y queda reducido a la soledad.”
Personalmente, tengo que decir que no es la novela de Saer que más me gustó. Como dije anteriormente, la historia base no logró atraparme del todo, incluso la manera en que Gina se conduce con Bianco me llegó a irritar. Pero éstas son apreciaciones demasiado personales. Creo que se trata de un texto histórico excelente, una muestra de esa buena literatura que no es tan fácil de encontrar.
ADVERTENCIA: No tome al pie de la letra a la contratapa de Seix Barral cuando dice: “Bianco, cada vez más obsesionado por la fidelidad de su esposa, constata cómo a medida que acumula riqueza material va perdiendo sus poderes y queda reducido a la soledad.”
Comentarios
De saer leí "cicatrices" y "el entenado".
Que me recomendas para seguir?
"Nadie nada nunca"??
Luego seguiré con el limonero real. Sé que acaban de hacer una adaptacion cinematográfica.